Nos mudamos a Dossier Geopolítico

19 de octubre de 2007

El Conflicto con Gran Bretaña se profundiza.....

Y vienen por más
(*) Por Carlos A. Pereyra Mele

Hace un año describimos la actual situación de la Geopolítica Internacional como: Siglo XXI y la lucha por el control de los Recursos Naturales. (1)

A la luz de los acontecimientos del ultimo mes, nuestro enfrentamiento histórico con la Gran Bretaña tiende a profundizarse, este enfrentamiento que tiene 200 años y que en varias oportunidades nos llevo a enfrentamientos bélicos con la potencia y sus aliados: 1806-1807: Invasiones rechazadas- 1833: usurpación de las Malvinas- 1845-1849/1850: Bloqueo a Buenos Aires y guerra por el control del Paraná, que terminan con la derrota del invasor y 1982: ultimo conflicto bélico con el invasor.

Y como lo expresáramos más arriba la dinámica geopolítica mundial se inscribe en la lucha por los recursos, para corroborar ello tomamos las palabras de altos dignatarios de EE.UU., el ex presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, declaro que la guerra de Irak fue fundamental-mente por el Petróleo, y el general estadounidense John Abizaid, ex comandante general del Comando Central (CENTCOM), le dijo al auditorio en la Universidad de Standford: “La Guerra de Irak: Por supuesto que es por el Petróleo, realmente no podemos negar eso”.

Por ello hace pocos días unilateralmente, Inglaterra inició los procedimientos diplomáticos para extender la zona de exclusión de Malvinas e Islas del Atlántico Sur a 350 millas náuticas de las 200 millas actuales, es más: ya concedió zonas de búsqueda y explotación a multinacionales.
Debemos recordar que esto se inscribe en lo que el diario The Guardian consideró como la nueva guerra fría por los recursos estratégicos, y coincidió con la decisión de Rusia de plantar su bandera en el Polo Norte como símbolo de que es de su exclusiva soberanía esa región, y que los recursos le pertenecen.

Estos momentos son cruciales en la lucha por los recursos energéticos ya que los “expertos” dictaminan que es sumamente probable que el barril de petróleo alcance los US$ 100, según Merrill Lynch. (Información que desde el CeeS manejáramos desde principio de año).

Esta pretensión de Inglaterra hoy se profundiza al llegarnos la información (Diario The Guardian), de que ahora intenta ampliar su área de explotación al incluir la Antártida (2), dentro de su esquema de ampliación de zonas que usurpó y otras que intenta arrebatar, es evidente que su geopolítica se ha desplazado hacia el área del Atlántico Sur. Y no debemos olvidar que este tema tiene una doble arista: no sólo el aspecto fáctico, con la ocupación ilegal de los territorios usurpados y depredados (como es el caso de la pesca en Malvinas); sino también el legal, ya que la canciller federal alemana Angela Merkel, intenta reflotar la Constitución Europea que, debemos recordar, dará status de miembros plenos de la Unión Europea a los territorios de ultramar de la misma UE, lo que permitiría a esos estados de disfrutar de esos recursos. Esto nos llevaría a una situación de gran desventaja a la hora de defender nuestros derechos y recursos.

Por ello coincidimos con lo expresado en La voz del interior del día de la fecha cuando expresa:”Al margen de los tecnicismos y limitaciones que imponen los acuerdos internacionales, la avidez de las grandes potencias por más territorios y recursos energéticos no tiene límites.”

La realidad que es la única verdad, nos esta mostrando que ahora; vienen por más: ahora vienen por los recursos minerales y energéticos de las zonas en conflicto, es muy seguro que Inglaterra tenga en consideración la alta probabilidad de un ataque a Irán por parte de EEUU, y que ello desestabilizaría todo el Medio Oriente, y la consecuencia directa sería el encarecimiento del barril de petróleo que según los analista del mercado lo llevaría a los USD400; pero también tendrá en cuenta las grandes reservas minerales. Que hoy en día se están extrayendo a precio vil de nuestro continente (de Argentina en particular), a lo que se agrega el daño ecológico y de salud a sus poblaciones. Con lo que se nos incrementarían los daños al ecosistema al contaminarse el Atlántico Sur con la extracción de los mismos sin control de los verdaderos interesados o sea los Pueblos del Continente Suramericano.

Desde el 11S todo cambió, y la lucha por los recursos se disfraza de lucha contra el Terrorismo, contra el narcotráfico, etc., pero siempre donde hay recursos estratégicos. Si no tienen esos recursos, dejan que esos pueblos se cocinen en su propia salsa.

Argentina y América del Sur deben tomar nota de este nuevo plan, y para ello redefinir sus relaciones. Es imperioso incrementar el MERCOSUR, que no sólo sea un mercado común, sino que se alcance una unión de estados y pueblos, que se intensifiquen sus relaciones políticas, sociales y económicas, pero también militares, como recientemente lo destacara la administración brasileña al desarrollar un sistema defensivo de la Amazonia. Y ya es tiempo de dejar pretensiones de soberanías limitadas e incorporar a los estados del Cono Sur a una real política antártica, es tiempo de pensar en la Antártida Suramericana (3). Por todo lo que está en juego no podemos dejar este tema en manos de los “políticos profesionales”, (parafraseando al inglés Winston Churchil: “la Guerra es muy importante para dejarla en manos de los Generales”). Este nuevo cuadro de situación nos obliga a una discusión, análisis y toma de posición y acción de todos los sectores sociales del subcontinente Suramericano: Gobiernos, políticos, comunicadores, org. gremiales, sociales, económicas, universidades, intelectuales y militares. Si queremos tener un futuro.

Córdoba 18 de octubre de 2007

(*) Lic. Carlos A. Pereyra Mele
CeeS
Centro de Estudios Estratégicos Suramericanos
licpereyramele@gmail.com

(1) http://licpereyramele.blogspot.com/2006/10/nuevos-escenarios-mundiales-en-el.html
(2) http://www.lavozdelinterior.com.ar/defaultak.asp?edicion=/07/10/18/
(3) http://www.rodolfowalsh.org/spip.php?article613